Limpieza con Agua de Tabaco

Las culturas indígenas americanas como los aztecas, mayas, etc. usaban el tabaco en sus celebraciones y rituales. Posteriormente, fue introducido en Europa por los españoles que acompañaron a Cristobal Colón y, curiosamente, uno de ellos, Rodrigo fue acusado de brujería, ya que se pensaba que sólo el diablo podía otorgar a un hombre el poder de sacar humo por la boca. Debido a ello, acabo en prisión por decisión de la Inquisición.
Las culturas indígenas americanas usaban el tabaco como medicina y como elemento mágico en sus rituales y celebraciones
Los indígenas usaban el tabaco para purificarse y para llevar a cabo rituales para la paz ya que se creía que el tabaco agradaba a los dioses y tenía poderes mágicos. Asimismo, se solía usar para tratar las fiebres, el asma, los trastornos intestinales, las mordeduras de animales, etc.
En las tribus del Norte de América, es decir, las que habitaban el actual territorio de los Estados Unidos, el tabaco era considerado un regalo de los dioses al primero de los seres humanos y por esta causa propiciaba las invocaciones que los espíritus elevaban a los cielos cuando se arrojaba al fuego.

En las religiones afro-americanas, como la santería y el candomblé, el tabaco es un instrumento muy valioso para los rituales y se usa en trabajos de adivinación, buena suerte y amor. La planta entera del tabaco se usa para fines mágicos

Las virtudes mágicas del tabaco no se limitan a los cigarros ya que son muy importantes, también, las semillas y las hojas de la planta.

Nosotr@s vamos a realizar una limpieza en nuestra hogar con este instrumento mágico. Ahuyenta las malas vibraciones, mata las larvas astrales y barre la negatividad.

Materiales:
Cuarenta gramos de buen tabaco ( también puedes desmenuzar dos puros) que compraremos en el estanco.
Bolitas de algodón
Unos carboncillos

Procedimiento
Cogeremos una cacerola pequeña con agua y la pondremos al fuego. Seguidamente, vierte el tabaco y deja que hierva durantes unos diez minutos.Una vez pasado este tiempo, retírala del fuego y deja que se enfríe.
Luego, colaremos el tabaco, guardaremos el agua y pondremos a secar los restos del tabaco extraído.
Cuando se hayan secado por completo, enciende los carboncillos, sobre los cuáles habrás colocado los restos del tabaco, y quema el tabaco. Ello debe hacerse con todas las ventanas y puertas exteriores de la casa cerradas.
Seguidamente cogeremos unas bolitas de algodón y las empaparemos con el agua del tabaco, dejándolas en las esquinas internas de las paredes de cada habitación, hasta que se termine de quemar todo el tabaco.
Dejaremos que todo el tabaco se queme mientras repetimos la invocación. Mientras limpias, irás repitiendo:

"Limpia y pura, es la buena fortuna,
como este tabaco bendito que me(ó nos) abre caminos".

Frota con las bolitas para quitar la suciedad acumulada en las esquinas, generalmente, en el suelo.
Cuando termines recoge todos los restos, colócalos dentro de una bolsa de plástico que anudarás tres veces, y echarás en el contenedor más alejado de tu casa, sin mirar atrás, o bien en el mar.

Abre todas las ventanas y ventila bien la casa. Notarás que el ambiente está purificado y que se nota la positividad en el ambiente. Realmente es una gran limpieza.